El sudoku es un pasatiempo estadounidense que se popularizó en Japón en 1986 y se dio a conocer internacionalmente en 2005.
El objetivo es rellenar una cuadrícula de 9 × 9 celdas (81 casillas) dividida en subcuadrículas de 3 × 3 (denominadas cajas o bloques) con las cifras del 1 al 9. El pasatiempo se presenta con algunos números ya dispuestos en algunas celdas (denominados números dados o pistas).
Las reglas del juego son simples, de fácil aprendizaje para principiantes y no requieren de conocimientos matemáticos, a pesar de ser un juego basado en números. Existen sudokus de distintos niveles de dificultad. La práctica en la realización de sudokus permite progresar en la complejidad de los ejercicios. No es necesario completar el ejercicio en una sola vez; puede empezarse un sudoku en un momento del día y terminarlo en otro, o incluso cualquier otro día.
Reglas:
No puede repetirse ninguna cifra en una misma fila, columna o bloque. La solución es única, es decir, solo existe una forma correcta de resolver cada sudoku. El objetivo es rellenar las celdas vacías con un número en cada una de ellas de tal forma que cada columna, fila y bloque contenga los números del 1 al 9 solo una vez.
Habilidades ejercitadas:
- Percepción.
- Memoria.
- Lógica.
- Análisis deductivo.
- Estrategia de planificación.
- Memoria de trabajo.
- Coordinación.
- Paciencia.
Orientaciones y consejos para principiantes:
Empiece por los sudokus de nivel muy fácil. Empezar por los difíciles puede resultar muy frustrante, cuando debe ser un pasatiempo entretenido y divertido. Practicando con los fáciles puede ir aprendiendo a resolver los más difíciles.
Utilice lápiz y goma de borrar. A veces, sobre todo al principio, suelen cometerse frecuentes errores, incluso hasta llegar a borrar todo lo que se lleva hecho. Hay quien prefiere usar lápiz para los números dudosos y bolígrafo para los que cree seguros.
Cada sudoku tiene una única solución. Esto implica que en cada casilla solo puede ir un número de los posibles del 1 al 9. Solo deben considerarse como definitivos los números que sean los únicos posibles en cada casilla. Si en algún caso puede ir más de uno, examine el resto de casillas y deje esa para más tarde.
Empiece por los números que aparecen más veces. Suele ser más fácil adivinar los que faltan cuantos más números haya de un mismo valor. Si se da el caso de llegar a tener 8 veces el número 3, el único 3 que quedará por colocar será en la intersección de fila y columna donde no aparezca.
Anote números en pequeño como ayuda. Una opción es escribir los números posibles de cada casilla en pequeño, en una esquina. A medida que van descartándose, se van borrando, hasta que solo quede uno: el correcto.